Diario of Juan Bautista de Anza

Exploratory Expedition, 1774


Tuesday, February 1, 1774 EN -- Dia 1 de Febrero.: A las 8 de la mañana nos pusimos sobre el camino en que hiciemos noche con rumbo al Norueste montamos inmediatamente unos cerrillos que deben de tener oquedad porque al pisar las caballerias resultava un sonido semejante al de Calabazas, pasados estos que ocuparon una legua andadas otras dos por mejor terreno se llegó á el Aguaje.

Este se halla en el centro de varios cerros cuya entrada mira al Oeste, tiene 6 quiebras de agua llovediza mui buena, en la 1». beben las bestias llenandose con facilidad con las de arriba por medio de subir á ellas para vaciarlas por el natural conducto que tienen de peña viva todas; en ellas hay gran porcion de agua, y tanta mas se podria copiar si les quitasen las piedras y arena de que abundan; se dio bien de beber á todo, y solicitandose pasto se halló á alguna distancia.

Estas quiebras la de atras, y otra que esta adelante las havitan en tiempo de la mayor seca y hasta que dura el agua que se recoge en ellas los Papagos por el interes de cazar, en ellas carneros silvestres que son en la piel y demas semejantes á los venados grandes, solo se diferencias en la cornamenta que es mas gruesa que la del mayor Buey la hechura y posesion es como la de los carneros comunes: viven entre peñas las mas encumbradas y dificiles de montar son propios de tierras secas y esteriles, su carne mejor que la de venados se propagan mui poco, y casi nada corren en tierra llana por el embarazo de la cornamenta; esta tienen cuidado los indios de no desperdiciarla pues de donde quiera que matan al carnero lo traen cargado hasta cerca de los aguajes en donde las ban apilando para impedirle al aire salga de aquel sitio; a los que no siguen ó saben esta abusion, como a nosotros les advierten no quiten ninguno de su lugar porque saldra dicho elemento á molestar todos y se experimentan mayores trabajos.

Wednesday, February 2, 1774 EN -- Dia 2 Le puse a este Aguaje la Purificacion y en el tube noticia de que la recua llego al empinado con bastante fatiga y algunas mulas cansadas, en cuya vista determin? el esperarla aqui, y embiarle el Arriero en refuerzo las pocas que traje con mi preciso equipaje, y otras menesteres que marcharon oy. De Tubac al aguaje de la Purlficaclon 114 lgs.

Thursday, February 3, 1774 EN -- Dia 3 Al medio dia del arribo de la requa á la verdad bien descaecida por cuyo motivo me pareció no marchar hasta otro dia. De Tubac a los pozos de En Medio 119 lgs.

Friday, February 4, 1774 EN -- Dia 4 Con las 8 y media y rumbo al Oeste Norueste nos pusimos sobre el camino que va á unos pozos por buen piso dejando cerros a ambos lados y caminadas 5 leguas, se 11egó á ellos los que inmediatamente hize abrir y se reconoció vertir la agua suficiente para todo lo que conducimos y haver pasto; se hizo alto en ellas para parar la noche á los quales se les llamaron los pozos de enmedio.

Saturday, February 5, 1774 EN -- Dia 5 A las 7 y media nos pusimos en marcha por camino hecho con rumbo al Oest Norueste y caminamos 7 leguas siempre dejando cerros á ambos lados; se llegó al Aguaje que por lo estraviado que esta del camino inferimos sea el que llamaron los Padres Jesuitas la agua escondida en la que con mucho trabajo se logró darles a solas las caballerias por que con la entrada de la noche lo escaso del manantial, ? incomodidad de el, no se pudo efectuar lo propio con el ganado, que se dejó para otro dia.

En este paraje hallamos á un Papago con su familia natural del Pueblo de San Marcelo de Sonoitac (Christiano llamado Luis) para donde se retiraba de los Rios Gila, y Colorado, y de donde habia salido el dia anterior con el fin de avisarme, ya noticioso de mi venida en los Rios, para que entrace á ellos con la prevención de que parte de su gente en especial la retirada de la Junta de ambas para arriba estaba resuelta á impedirme el paso de ellas, y a quitarme la vida con los Padres y demas que me acomparian para aprovecharse de nuestras caballerias, y demas que conducimos; avisado tambi?n que el capitan de los Yumas (que llamamos Palma) á quienes el mes antes habia yo visto en el presidio del Altar, y comunicandole mi venida no habia podido desimpresionar á los tales de su intento, y que tenia declarado (su intento digo) estar siempre a mi favor con toda su Nacion y a otras su aliadas del Rio avajo á cuyo buen modo de proceder la ayudaban otros dos capitanes, ó Mandones: que estos con dicho Palma, decia el papago estaban atajando a los inquietos haciendoles presente su mal obrar, y su perdon y su perdicion, pues la tropa era suficiente por su valentia, y armas, a acabar con muchos mas, sinos provocaban; que no haciendolo asi, eramos de condicion tan buena; que sin ninguna fuerza les regalariamos lo que traimos, y apetecian, como lo haciamos con el mismo Palma cuando iba a nuestra Poblaciones, donde era tratado cariñosamente con los que le acompañaban. Estas noticias, aunque no me hizo entrar en el maior cuidado, me sirvio de luz, para en el caso de tener algun fundamento, proporcionar los medios para que no tubiese efecto enteramente; pues ninguna inquietud en estos principios nos era provechosa, y siendo una de las primeras atenciones, que me ocupan y á que conspiran las ordenes del Exmo. Señor Virrey y Junta de Real Hacienda, y Guerra es obviar tales inquietudes, dispuse asi practicandolo para su efecto con dictamen de los RR. PP. que me acompañarán, que informaron al mio procure saber de raiz que fundamento tenia esta ocurrencia, la que ninguno nos podia participar mejor, que dicho Capitan Palma, á quien seria oportuno hablarle antes de darme por entendido del asunto con los inquietos: para conseguirlo detemine enviar a llamar, o antes de mi arrivo a los Rios con el Author de lo repetido, ofreciendole caballo, y regalarlo, a lo que con gusto dijo, iria otro dia, por estar en el presente cansado, y conocer tenia tiempo para venir con dicho Capitan a encontrarme a la mañana del siguiente que debia ser el de mi ingreso a ellos. De Tubac al Agua Escondida 126 lgs.

Sunday, February 6, 1774 EN -- Dia 6 Domingo. A las ocho de la mañana envie al mensajero citado anteriormente en un buen caballo quien ofrecio de nuevo salirme mañana al camino.

Una hora antes se comenzo a dar agua a nuestras caballerias para estar desocupados al medio dia para marchar a llegar a los Rios, pues no es posible hacer aqui mas maneon [Footnote 41], tanto por la poquedad del agua como por el menor pasto.

En efecto a las dos de la tarde nos pusimos en camino, hecho con rumbo al mar para doblar sierraicilla, en si tiene el agua escondida, á cuia falda y rumbo se camina como legua y quarto, y dejandola a derecha doblada se torna al surueste, sobre el que se hicieron cinco leguas mas acia las nuebe de la noche, que se hizo alto en medio de bastante pasto: en la marcha de este dia y en la de la anterior hemos venido dejando de nuestra izquierda los Medanos, y Arenales, por donde trazarian su camino al Rio Colorado los Padres Jesuitas lo que le costo la perdida de muchos de sus viajes cuio transito tan penoso, si no discurrimos mal solo lo podian hacer llevados del concepto, de que para todo el Colorado en las inmediaciones de su desarribo que al Golfo solo podrian hallar el paso, que solicitaban.

Monday, February 7, 1774 EN -- Dia 7 Lunes. De Tubac a la Isla de la Santisima Trinidad en el Rio Gila 138 leguas. Apoco que salio el sol nos pusimos en marcha por el camino sobre que pasamos la noche, siempre desechando el medano citado de la izquierda, bieres que en la distancia de como dos leguas y medias se pasan algunos pedacillos de el antes de llegar al Rio Gila.

A igual distancia, y á las onze de este dia me salio á encontrar el Mensajero, que envie el dia anterior con uno de los Mandones de los Yumas, por no hallarse en su Rancheria el Capitan Palma; este dicho es dependiente suio quien de a luego me dijo estaba con todos los suios de corazon bueno con deseos de conocernos, y de que llegasemos a sus xasas para obsequiarnos en lo que pudiesen, y que en esta fee fuesemos prontos, pues hay voces de inquietud, que ya sabria yo, estaban desvanecidas por el, y su Capitan Palma, quien a su vista nos informaria lo propio, verificando esta en el dia.

Venia este mandon en consorcio de otros ocho individuos suios, sin mas armas, vestido, y equipaje mas que un tizon en las manos . Los otros igualmente desnudos con su arco, pocas flechas, y montados en buenas Yeguas, luego que acavó su comunicación á que le contest? cariñoso, le dije que destacase a uno de los de su comitiva á avisar a los suios me viniesen a ver con el seguro de que á todos los querria, y á nadie perjudicaria, ni incomodaria, lo qual executó: luego, sin ser á la verdad necesario, pues de aqui para adelante todo el terreno estaba lleno de Gentes las mas desarmadas.

Como a las tres de la tarde bajamos al Rio Gila caminadas cinco leguas, y ya con una compañia de mas de 200 Hombres, todos placenterisimos de nuestra venida, la que celebraban con gritos, y risa, como asi mismo hechando puñados de tierra al ayre, y otras demostraciones, dando indicios de la maior sencilles, y amistad. A dicha hora se paro en el primer pasto y buen terreno, que se halló, á donde á cada interprete, digo instante, fue conrriendo mas gente de ambos sexos, que mientras mas no verán las personas, trajes, y demas de nuestro uso, mas se maravillaban.

A las cinco de la tarde llegó a nuestro campamento el Capitan Palma con mas de 60 personas, que le hacian compañia, luego que se desmonto, me pidio le abrazara; lo que execute con toda apariencia de afecto, le hice se sentara, y le dimos algun refresco: despues de lo qual me dijo: sentia no haverse hallado a mi arrivo en su Rancheria, para que de una vez hubiera pasado hoy á ella; que ya habia reprendido a su gente por que no me lo propusieron, y que el motivo de no haberme salido a recibir antes fue, el de que quando llego a su casa mi enviado, se hallaba retirado della algunas leguas, que acababa de andar; y que las novedades de algunas oposicion contra nosotros, que ya suponia yo sabria, no tenian efecto, pues los que la habian producido no eran Hombres para ello; ni de su gente, que eran de retirado de su casa, y del Rio arriba, y que luego, que hecharon la especie, los expelio de su jurisdiccion; que asi no entrase por ello en cuidado; pues el se regocijaba con toda su Gente de nuestro transito, por su abitacion, á la que, como me habia ofrecido en el principio en el Presidio de Altar la tenia convocada, a quien me viniese aver con la prevencion de que nada hurtasen ni nos molestasen en otro asunto: que tuviese a bien el dejarme veer y tentar de los suios, pues lo apetecian, en especial los que nunca habian visto, que eran los mas para que comprendiesen como eramos y para que nos servian las cosas de que vestiamos, y usabamos.

Observó dicho Capitan, estando en esta conversacion, que los soldados andaban con la espada en el veric?, manteniendo los caballos prontos con otras propiedades de la vigilancia de la tropa, y me pidio, que todos se pusieran en descanso, y soltura en la buena fee de su amistad, y de no haber peligro, que temer, a lo que le dije; que a los soldados nos eran indispensable tales distribuciones en donde quiera, y aun fuera de todo riesgo, como no lo habia dentro de los presidios, y le constaba que diariamente entraban Hombres de guardia, y que esta se hacia, como si se estubiera delante de los Enemigos, con lo que quedó satisfecho: despues de esto le contexte á su primera conversacion, dandole muchos elogios por su afecto, y fidelidad, diciendole, que con toda confianza dijere a los suyos, llegase a verme bien, y como quisiesen, que en todo le complaceria como a mis Hijos, y Amigos, pues uno y otro lo eran, siendolo el mio.

Atendiendo a la fidelidad que este Indio nos profesa, y á lo que nos importaba para todos tiempos, y ocurrencias el tenerlo ganado, me parecio ser conveniente hacerle alguna distincion de los demas, y gratificarle como correspondia a su buen proceder, en cuia virtud le dije hiciese arrimar a todos los suios a mi tienda, y estandolo le pregunte, que si lo conocian por su Capitan, y superior, a lo que respondieron, que si, y entonces les dije, que yo lo confirmaba en nombre del Rey (que era dueño de todo) en su empleo, y para que mandase en Justicia con mas autoridad, y fuese conocido aun de los Españoles, que le guardarian sus fueros, le colgaba, como lo hizo una Cinta encarnada con una moneda de su M., de quien era aquel retrato, que en ella se manifestaba cuia honra le hacian por la obediencia, que habia de profesar al Rey, lo que ofrecio cumplir; al colgarle la Moneda lo abrazó, y quedó con uno, y otro placenterisimo, y los centenares de su Gente admirados de la dadiva y mi demostracion de afecto manifestando al de ellos con suma alegria.

Notando el aprecio, que dicho Capitan hacia de su insignia, que no tenia ojos con que mirarla, ni expresiones, con que mostrarme su agradecimiento, pues llegó a decirme era su Amo. Tome ocasion para decirle delante de otros dos de sus subalternos, que no habia mas de un Dios, que era el que nos habia criado con el cielo, el Sol, la Luna, Estrellas, y quandto hai en la tierra; y un amo que era el Rey, que este estaba sujeto á Dios, y á uno y otro todos los Españoles, que eran tantos mas, quantos el se podia imaginar: que Dios habia dado al Rey todas estas tierras, y muchas mas, que el ignoraba llenas de Españoles, y que por eso nos mandaba á todos, que estos no solo le obedeciamos; sino que venerabamos sus ordenes: que nos queria tanto el Rey, que por eso nos abundan los caballos, Vestidos, como Fierros, Belduques, y cuanto poseiamos, que a ellos tanto le agradaba, pues de mucho mas tenia proveido su Reyno, para que en el lo adquiriesemos con nuestro trabajo, a manera como ellos consiguen el tener mas trigo, y otras frutas, que no los tiene, quien no afana, pero que, aun sin este da el Rey mucho de valde, como el ha visto en los Pueblos de Pimas, que mantiene á los Padres, Iglesias, y otras cosas: que el Rey á mas de ser liberal con todos, lo es con mas exeso con ellos, y todo Yndio, a quienes no les pide, ni quita nada; que ha mandado el que todos los españoles les digan Hermanos, y que porque los ama á todos me envia por estas partes, pasando trabajos, á que los visite, y les de paz en su nombre, y para por mi informe tener noticia de ellos, sin perjudicar a nadie: que si esto experimentaran en la cosa mas leve de la Gente, que yo mando, me lo verian castigar severamente; y que en nombre el mismo Rey los ire regalando á mi paso por las Rancherias, y que el Rey no quiere de ellos otra cosa, que es el que le correspondan el amor, que les tiene, le. rindan vasallaje, y obediencia, viviendo sin matarse, unos a otros; que esto tambien lo manda Dios, pues todos somos Hijos de uno, y otro, y asi como á qualquiera de ellos no les gusta se maten sus Hijos; pues qualquiera que muera seria terrible para el Padre; asi tambien a Dios, y al Rey: que todo esto se lo decia para que el se lo comunicara a sus gentes, lo cual oyó con mucha atencion, diciendome, que nunca habia oydo cosas mas gustosas, y que las haria saber a todos los que dependian de su mando.

A poco rato esta conversacion me pidio dicho Capitan mi Baston, lo tomo en la mano, grito a los suios, y en medio de ellos comenzo un razonamiento, que duró mas de una hora: quando lo hacia observamos, que mui a menudo se tapaba los concurrentes las vocas (accion de admiracion) concluido mandó a todos se fueran a sus chozas que mui pocos lo executaron, pues los mas se quedaron a dormir entre nosostros, con tanta satisfaccion, como si hubiera años nos trataban. Vino á mi dicho Palma, y me participo haber comunicado a su Gente lo que yo á el que todo lo habian oydo con gusto, y que lo mismo haria en otras Rancherias, conforme fuesemos pasando por ellas hasta donde me acompañarian; y que en estos asuntos tambien les hablaria a otras Naciones aliadas suias.

Tuesday, February 8, 1774 EN -- Dia 8 Martes. A iguales horas nos pusimos en marcha Rio Gila abajo, y andando media legua a su orilla, llegamos al Vado, que nos guio el Capitan Palma, en donde hice descargar para pasar la carga, que se ofrecio dicho Capitan hacerlo á la cabeza de los suios, los mas fuertes, y grandes; a lo que conviene viendo la voluntaridad, con que se ofrecian, no habiendo indicio para desconfiar; no obstante pase yo primero con la mitad de la tropa, inmediatamente siguio la caballada, y ganado, y despues fue pasandose la carga, que se concluio con toda felicidad a las tres de la tarde, y á presencia de mas de 500 Personas; a donde se acomodó, y descargó, paramos por no haber tiempo para pasar el Colorado, y asi nos quedamos a pasar este dia en el medio de ambos Rios, que a mui corta distancia se unen.

Aqui mismo se forma una hermosa Isla, que la llam? de la Santisima Trinidad de un brazo del Rio Colorado, que antes de unirse con el Gila, se lo introduce á este cuio paraje es la residencia comun del Capitan Palma de los Yumas. Habiendose juntado en ella mas de 600 Personas de 8 años a 50 de ambos sexos, dispuse regalarla á todos, para ver, si exetutandolo nos dejaban un rato quieto, respecto a que desde que amanecio este dia todo era arrimarsenos, temtarnos, y preguntarnos sobre todo lo que usabamos, y otras impertinencias de esta naturaleza, los puse en orden a todos, para obviar el que algunos tomasen dos veces, con lo que se le dio a cada uno su poco de abalorio, y tabaco, que estimaron mucho. Su Capitan les hizo un razonamiento semejante al antecedente referido les mandó agradeciesen la dadiva y que se fuesen hasta otro dia para dejarnos descansar como lo hicieron; pero muchos se quedaron hasta el hacerse de noche, á cuia hora se comenzó á hacer alguna cosa de alimento, pues antes no fue posible con el desorden de tal Gente que no habia cosa de que no admirasen, y por tanto fue menester hoy la maior paciencia y tolerancia.

Cuando estaba en el reparto referido llegó un indio en cuero vivo como todos con unos Ayes tan lastimosos que parecia le ocupaba la maior aflicion, y dolor.

Daba tres de estos á cada individuo, tentandole al hombro, y asi iva pasando por todos,; pregunte, que mal padecia aguel hombre, que a la verdad me compadecio, y me respondieron que ninguno, que era de las Rancherias del Rio avajo, que traia la noticia de habersele muerto su Padre y que por tanto venia a combidar á todos los presentes, á que fueran a llorar a tiempo de que le daban fuego al cuerpo del difunto, que era la especie de Funerales, que acostumbran hacer.

Wednesday, February 9, 1774 EN -- Dia 9. Miercoles. De Tubac a la junta del rio Gila y Colorado 138 leguas o poco mas. Cuando las precauciones del antecedente dia. a las nuebe de este comenzamos a pasar el Rio Colorado por un particular vado , a que nos guio el Capitan Palma, lo que se efectuó con toda felicidad, a presencia de mas de 600 de Hombres, que los mas, y hasta las Mujeres, y muchachas coperavan, á que no desviasemos de las partes, á donde nos decian, estaba lo menos hondo, con lo que conseguimos pasar todos á caballo, sin mojarnos cosa maior.

En celebridad del mencionado paso (que no se ve, logra hacerlo en la conformidad dicha en otra parte de este Rio), y de ser la primera vez que lo efectuan las Armas del Rey, hice hacer salva, y disparar algunos cuetes que gustavan á los indios por su vuelo, bi en el que el tronido los atemorizava de modo, que al oirlos se hechahan a tierra.

Despues de lo dicho medi la actual anchura que ocupa el Rio Colorado, en donde me dijeron unos naturales era la regular en el tiempo de la maior seca del que es la presente, y tiene 95 Brazas y un poco mas con cinco palmos de fondo en lo comun, yendo aqui de menos el Brazo, que forma la Isla, de donde hoi salimos.

El Gila no lo med?, porque donde lo podia haber efectuado ya tenia introducido el mencionado Brazo del Colorado; pero segun el informe de los indios se puede regular la mitad menos en todo; solo en la mejoria de agua le excede el Gila; bien que la de ambos Rios no son las mejores; pues tiran un poco a saladas.

Practicando lo expresado antecedente hice pasar todo nuestro carruaje en el mismo citio donde se unen los repetidos Rios, y ya juntos pasan entre las poqueñas Cerritos de Pena Fuerte, a cuio citio le Pusieron los Padres jesuitas San Dionisio, y del de la otra parte observamos las alturas que dicen ser de 35 grados.

A los de esta parte les di el nombre del Puerto de la Concepcion, que presentaron una vista mui agradable, distinguiendose de ellos el mencionado confluente de los Rios la inmensa Arboleda de Sauces, y

Alamos, que los pueblan, tanto para arriba; como para avajo, y hasta donde puede alcanzar la vista, utiles todas por su derechura para vigas. Se ve igualmente una Sierra inmediata, por cuia Abra sale el Rio Colorado al Nor Norueste al que se mira un gran Picacho, que por .su magnitud y hechura le puse la Cabeza del Gigante, y al Este Noreste otra Abra en una Sierra, que corta el Gila, y tambien en otro Picacho menor que el anterior, al que llam? la Campana por figurarse asi.

Este dia no fue menos molesto, que ayer por la concurrencia de mas de 800 Personas a quienes se gratificó con una Res, Abalorio y tabaco, los que parecieron hoi mas desarmados, y se quedaron a dormir entre nosotros muchos mas que anoche. Aqui habl? con un Indio de Nacion Soyopa , y me dio la noticia, de que tres dias de camino Rio Colorado arriba donde el viaje, se partia; que lo mas caudaloso era este, y el menor brazo tiraba para el Norte á juntarse con otro rio maior, que este Colorado, y que aquel en realidad es su agua mas colorada que la de este, cuio desague al mar dice lo ignoran. Igualmente me participo otro que tres jornadas abajo de este Rio Colorado los Naturales, que lo habitaban; le habian dicho que a cinco dichas mas de ellos pasaba un camino de Españoles cuias Gentes presumimos sean las del Puerto de San Diego, pero que para llegar á el habia mucha escacez de aguas, aun en tiempo de ellas.

He preguntado si este rio tiene algun salto, y me aseguran, que de aqui hasta donde desemvoca al mar, no lo hai, ni que sepa lo tiene para arriba en muchas leguas, de que tienen noticia. No parece. haber duda de que diste poco de aqui la Provincia del Moqui, pues segun los diversos informes que he tomado, solo median tres o quatro Naciones. Los texidos de ellas de lana negra y azul. Se ven en abundancia entre estos Yumas quienes los adquieren por la Nacion Soyopa ya expresada.

Thursday, February 10, 1774 EN -- Dia 10 Jueves. De Tubac a San Pablo en el Rio Colorado 143 leguas. Poco despues de las ocho, levantado nuestro tren nos pusimos en camino Rio avajo con rumbo al Oeste Norueste, y con un acompañamiento de mas de 600 Personas, que a porfia nos enseñaban las mejores veredas limpiandolas de poqueñas varas o pajas, que tenian, y con la misma eficacia se acomedian a arrear las Mulas de carga, caballos, y ganado, llevando cada animal a cinco, o seis Hombres a su lado que tenian la satisfaccion de estar conduciendo.

Caminadas como quatro leguas a dicho rumbo se paró á la falda de un cerro, que llamamos San Pablo, y de el, tomando al Oeste por otra legua se hizo alto para pasar la noche á orillas del Rio, en donde habrá algun Pasto, y muchas abitaciones de Yumas.

A este citio concurrio mas Gente que en los precedentes, á quienes se le regaló con abalorios tabaco, y una res cansada, entre la muchedumbre de ella, que se quedó a pasar la noche entre nosotros, ya sin ninguna arma nos llevaron una lanza, y Azuela, porque no se dejare de veriftcar uno de sus accidentes inseparables, cuio hurto participado por mi, y afeadp al Capitan Palma, lo reprehendio severamente, y me ofrecio que á la vuelta lo tendria restaurado, y castigado.

Friday, February 11, 1774 EN -- Dia 11 Viernes. De Tubac al mismo Rio 149 leguas. A las ocho de la mañana nos pusimos en marcha Rio avajo con rumbo al Oest, y el acompañamiento citado, que nos duro como hasta una legua antes de llegar á donde ivamos á hacer noche, al que solo arrivaron como sesenta personas, incluidas las que bivian en este sitio, que distancia del anterior seis leguas, y es el ultimo termino, o Jurisdiccion del Capitan Palma, y en que remata la Nacion Yuma.

No habia dicho nada en particular de esta Nacion por que como tenia que transitar por ella, y el terreno, que ocupa, quise entre tanto observar mejor uno y otro para con mas fundamermo hablar de sus asuntos. Es por lo general mui robusta, de mas de ocho palmos detalla, su genio lo mejor que se Vee en Indio; pues son mui festivos, cariñosos, y liberales. Su color no tan negro como otros, no son de los mas rarados (À); tiene naturalmente buenas caras; pero se hacen feroces con el embije de todo el cuerpo, y en especial la cara. Van todos los hombres enteramente desnudos, sin el mas leve asomo de rubor y esto lo tienen por hombria, i el hir algo cubiertos á accion mugeril, que ellos mismos me lo han dicho, tienen buenos Pelos, que se los componene de muchos y diversos modos con lodo mui fino, sobre el que se hechan un polvo de tan buen relumbron, que parece lo es de plata porque este peinado no se les deshaga duermen sentados; la cara ya se ha dicho se pintan extrañadamente de los colores negro y colorado, y en esto se incluyen tambien las Mugeres, llevan los hombres odoradas . ls orejas, el que menos con tres ventanas, y en lo mas comun cinco, y en todas ellas Zarcillos, las Narizes, o Ternillas tambien se odoran, y atraviesan en ellas un monton de plumas, y mas generalmente un palillo de palmo de largo, y mas grueso, que el maior cañon de aves , con lo que se acaban de hacer, sobre feroces espantables.

A las Armas, y Guerra parecen poco inclinados: raro tienen carcax ; pocos cinco flechas malas, con peor arco, de cuio modo va armada como la tercera parte; las otras dos solo llevan unas astas de cuatro varas (instrumento para jugar) y unos garrotes: los hombres de edad, y ya ancianos; los primeros expresados, con armas á poco frio, que haga por la mañana, o tarde, generalmente las deponen donde quiera, y cojen un tison, que regularmente se los pegan á los estomagos, ó partes posteriores para calentarse: atribuio a que tres horas, que solo dormian en las veinte y quatro del dia es por el poco abrigo, que tienen en especial quando estan fuera de sus Rancherias, que al menos en ellas tienen sus Jacalillos en terrenos bien blandos, en que se entierran, y reunen cuantos componen una familia: su lengua es facil para pronunciarla, y lo mismo me parece para escribir; la Castellana repiten ellos con tanta claridad como nosotros: Las mugeres en ella robustez, y tamaño corresponde a los hombres. Sus rostros son generales en el medio que se sabe de este sexo en Indios. No he visto ninguna horrible, fea, como en otras Naciones, ni ninguna especial hermosa en esta naturaleza. Van vestidas, ó medio cubiertas de solo cintura á las corbas, y rodillas, con unas Nagillas que hacen de las cortezas del Sauz, y Alamo dividido en dos piezas, poniendose el mas corto por delante, hacen de las mismas cortezas, y de la del Mezquite unas piezas anchas, que salen poco menos en lo aspero, aunque mas tupidas, que el que en el Reyno llamamos guangocho bruto: estas les sirven para taparse, y la que las lleva puede llamarse rica, y mucho mas las que consiguen otras piezas de Cueros, de Nutrias, Liebres, u otro animal de pelo: Uno y otro sexo va con el pie enteramente descalzo. Por lo que he visto de ellos, ? informado de lo que me restan regulo habrá tres mil, y quinientas Almas de esta Nacion Yuma, cuio numero me dice el Padre Garc?s, que ha observado mas despacio antes de ahora estas Rancherias. No se excederá mucho al más, ó menos de lo dicho.

El terreno que he visto de la junta de los rios aqui se halla á trechos, sembrado de trigo sin ningun riesgo; pero tan bueno, y amacollado , que el mejor de riego de nuestra tierra no le iguala: del mismo modo se vee, y conoce donde hacen las siembras de maiz, frijol, calabazas, sandias y melones, todo lo dicho en tal abundancia, que nos hemos maravillado y deseado se diesen tanto a las siembras los Indios, que tenemos reducidos: ayuda mucho a esta fertilidad de tierra, que es lo mismo por arriba, y mejor para avajo, las inundaciones anuales que recibe la Vega, despues de la Primavera de resulta del desecho de las Nieves interiores con la particularidad de que no destruie, o se lleva los Arboles, y logra en lo que menos la Vega en lamarse una media legua por una, y otra orilla, aunque muchos me dicen se derraman maior distancia las aguas, y esta fertilidad comprende á ambos rios considerandolos por si solos, pues consta que las Naciones, que los abitan logran iguales cosechas.

Todo lo que he visto de estos Rios en especial de la Junta para avajo, me parece seria mui a proposito para plantio de Viñas, y otros muchos Arboles frutiferos; pues se lograria que produjesen sin riego, y por la circunstancia del temperamento mas benigno, que apenas hemos sentido el frio de noche no se expondria a la contingencia de las Yelas. En los Cerrillos del Puerto de la Concepcion a mi corto entender por uno y otro lado juzgo se pueden hacer dos tomas del agua seguras, y llevarlas por terreno firme, vastante largo, con cuia deligencia se asegurarian del todo las siembras; y aun sin ellas se haran aqui las que no se pueden imaginar.

De pasto es escaso este Rio; pero faltan los precisos para mantener ganados sueltos; lo mas de su Vega abundan de carriso, con que se surten tan bien, y en tiempos de Aguas, aunque me dicen no son copiosos, es preciso haia o traer Yerbas, que sirvan al propio intento. Las caballerias que tienen estos Naturales se conservan gordisimas, bienes que pueden consistir en lo poco que las travajan, lo que deberá ser asi, respecto a que yendo esta Gente desnuda, y no teniendo el mar leve aderezo sobre que montar (pues solo al Capitán Palma se le vio sobre una mala Salea) es consequente que el calor inmediato de las bestias las prive de hacer la maior fatiga en ellas. Con el motivo de acabarse en este sitio los pertenecientes a la Jurisdiccion de los Yumas, y haberme venido á encontrar algunos individuos de la Nación, que va á seguirse, les pregunt? quales pueblan de aqui al Golfo que leguas hai? a donde desemvoca á el este Rio? Y me dicen puede distar este ultimo treinta, o quarenta leguas, que la otra Vanda la pueblan la Nacion Quiquima del distinto idioma del Yuma, y menos en numero, la que se estiende hasta el mismo desemboque, que hasta el por esta parte, y de aqui con las sierras inmediatas al Rio pueblan la Nacion Cojat, maior en mucho, que la mencionada Yuma, cuio idioma viene a ser lo mismo si no que hablan tan veloz que por esta causa no se entienden lo mejor: con uno y otro han tenido los Yumas hasta ahora hace poco tiempo guerra; pero en dia estan en paz, y han emparentado como ellos dicen por medio de muchos casamientos, que se han hecho mutuamente.

Estos he observado no los efectuan mui Jovenes, ni por lo que me he informado hai la maior Poligamia, á ninguna mujer he visto ni preñada, ni parida, que no demuestre de viente cinco años para arriba, y preguntandole por lo tardo de su casamientos me han respondido, no les conviene hacerlo con Mozas, por que no saben travajar.

Saturday, February 12, 1774 EN -- Dia 12 Sabado, A las ocho y media nos pusimos en marcha por el Rio avajo bastante retirado a la izquierda con rumbo al Sudoeste, y tambien al sur, segun lo demanda el Bosque, y caminadas, como quatro y media leguas se hizo alto en una Laguna de Mucha agua, y pasto, á la que llame de Santa Olaya , y asi las llamais, que deja llenar el Rio, quando sale de Madre.

A poco que nos pusimos en marcha me salieron al camino muchos de la Nacion Cojat , rogandome pasase por sus Rancherias, á quienes con agrado les respondi, que me era gravoso la separacion, que supuesto que gustavan de verme, y no vivian lejos de donde iba á parar, concurriesen alli como los antecedentes, con cuia razon se quedaron contentos y á pocos horas llegaron a centenares, á quienes se le gratico con Abalorio. y tabaco.

Procure informarme de esta Nacion como ya lo habia hecho antes por las Yumas, de saber que govierno tenian, y donde residia el que los mandaba, unos, y otros me respondieron, que carecian de ambas cosas pues solo cada cabeza de Familia mandaba en la suia de cuio govierno hizo burla el Capitan Palma, diciendome, fue como esta Nacion no era tan Gente como la suya, en nada imitaba a los españoles.

Los expresados Cojat, que como se ha dicho por la velocidad se distinguen del idioma Yuma en pocos accidentes mas se diferencian de los mismos, no son tan generales de buena talla, algo mas trigueños y por falta de tintes menos embijados, que en el desarme, desnudez, traje de Mugeres, y demas costumbres son lo propio. Las tierras que siembran me dijeron eran tan pingues, y fertiles, como las de arriba con mas abundancia de pasto: no posee esta Nacion tantas caballerias como la antecedente, que. es la riqueza, en lo que los exceden las Yumas.

Sunday, February 13, 1774 EN -- Dia 13 Domingo. De Tubac al Arroyo del Carrizal 161 leguas. Guiandonos á aguaje proporcionado algunos individuos de la Nacion Cojat salimos de Santa Olaya á las nuebe de la mañana con rumbo al OestNorueste, y á veces al Poniente por el camino que hicimos hallamos dos aguajes de gruesa, y salobre, sin ningun pasto, y caminando, como siete leguas hasta meterse el sol, por que este dia se cansaron varias Mulas cargadas, se hizo alto en un Arroyo, que llaman del Carrizal que es el unico comestible , que se halló para las bestias, el cual tiene abundancia de Agua; pero tan mala, como las dichas anteriores. En el Paraje, de que hoy salimos se quedó el Capitan de los Yumas Salvador Palma, y es de notar la ultima prueba, que nos dio de su carino, y afecto, pues haviendose disculpado varias veces de no podernos acompañar para lo de adelante por ser ya terreno de sus Enemigos, al despedirme de el no pudo contener las lagrimas, lo que executó mientras los demas le decian á Dios: esta accion me parecio ser la de maior prueba, y alabanza en un Indio Gentil, y en una especie de Gentes, que no le merecen otro tanto la perdida de los Hijos, y Parientes, pues, aunque es cierto, que hacen tales demostraciones, son fingidas, y aparentes, Poco antes de este suceso voluntariamente me dijo que ya quando me regresase a su casa habria ido llegando la grande avenida del Rio, pero que no tuviese cuidado del paso que desde luego á luego comenzana Palizada para hacer valisas, y pasarme con mas seguridad a la otra parte.

Monday, February 14, 1774 EN -- Dia 14 Lunes. De Tubac a los Pozos de Enmedio 162. A las nuebe de el nos pusimos en marcha con rumbo al Oeste, guiandonos solo dos indios Cojat: por que, aunque vinieron algunos hasta el carrizal se volvieron este dia, diciendo, estaban, ya cerca de sus Enemigos, y los dichos, a una corta legua que habiamos andado me bajaron al mismo Arroyo de donde salimos, el cual me expresaron no podian pasar por la razon, que dieron los antecedentes, y que de este aguaje en que abrimos pozos de mejor agua que la del pasado a quienes se les puso los de enmedio: alcanzabamos bien el otro de cerca de la sierra, para donde iva camino seguido, y á mas de esto me enseñaron la cituacion, cuias noticias dieron mas por señas, de que otro modo, las aqui para adelante será el Idioma, con que nos entendamos respecto, a que ya concluio el Yuma, de quien nos valiamos, y no hai proporcion para entender los sucesivos.

Con el motivo dicho de este Pozo, y de no haber en lo de adelante segun noticias ningun pasto para las Bestias, determin?, quedarme aqui este dia. en donde hai algun carrizo; como tambien por que llegaron las Mulas de Requa en fatalisimo estado sin embargo de haber sido mui contra la Jornada.

Tuesday, February 15, 1774 EN -- Dia 15 Martes. Nota. No se incluien en el resumen, que se va haciendo 25 leguas que se anduvieron desde este dia hasta el 19 que se volvio a la Laguna de Santa Olaya, por lo que de la mencionada Laguna para adelante continuaria el expresado rumbo.

A las siete de la mañana se emprendio la marcha con rumbo al OestNorueste por la vereda donde me dijeron los Indios, llegamos al Aguaje de cerca de la Serrania, el que no dud? haber por lo expresado antecedente, y por haber visto Humaredas en aquella parte, poco despues de andadas unas leguas hallamos un charco de agua mui salobre, de aqui pasamos por otra legua a algun medano, y encontramos con otro Pozo de Agua bien escasa; pero mas bebible, que el antecedente; despues de reconocido este pasamos adelante por el camino citado, el cual introducido en unos Medanos espesos se nos perdio totalmente, a causa de que las mueve el viento y lleva á varias partes.

Con el motivo de que en el Pozo citado anterior fue preciso dejar media carga; por que se conocio ser imposible el finalizar la Jornada con el todo de ella por el decadente Estado en que llegaron las Mulas. Al dar esta providencias, y de que quedaria con la Guardia suficiente propuse a los dos Padres que me acompañan, el que siendo ya del todo ocioso pensar el pasar por dicha imposibilidad de Mulas con toda la carga para adelante seria lo mejor el que de alli volviesemos la mitad de ella, y de la tropa a la Rancheria de los Yumas en consideracion de lo bien recibido que hemos sido de ellas, a esperarnos de vuelta, y que con la otra mitad, mas sim embarazo podriamos verificar nuestro arribo a la California Setentrional, que esta separacion la resolveria yo mui gustoso, y tendria el mejor efecto, y si queria quedarse alguno de ellos, pues con su presencia, y respecto, ni soldados, ni Indios era regular tuviesen algun desman, que perturbase la tranquilidad, que hemos experimentado en nuestro transito por los Rios, cuia resolucion tomaria yo igualmente en las presentes circunstancias, si trajese yo conmigo un oficial, en quien me asistiese la confianza de sus Personas. Esta proposicion no tuvo la aceptacion que yo me prometia, especialmente en el dictamen del Padre Garces, que no graduó por acto prudencial la division de fuerzas, ni que habia tanta necesidad de abrazarla, como yo juzgaba con el Padre Juan Diaz, y por lo tanto resolvi hacerle conocer mas claramente en los sucesos, que preveia acaecerian, sim embargo no quise cerrarme con mi dictamen, por que teniendose al Padre por practico en estos asuntos, si salia errado el mio, era cargarme de responsabilidades, y conceptuarme de caprichudo.

Pasado lo dicho volvimos a la Marcha, y á las once y media, despu?s de haber pasado bastantes Medanos, se nos presentó otro maior, y mas alto que era preciso pasar para llegar a la sierrecilla, donde nos dijeron estaba el Aguaje, lo cual parecio distancia cinco leguas, y que el Medano en el debil Estado, que iban las caballerias no lo podriamos vencer, y mucho menos las Mulas cargadas: por tanto verse otro cerrillo al sur mas cerca del que se conoció, se podria desechar el Medano expresado, y asegurar el Padre Garces que bien inmediato á el habia una gran Rancheria, en donde el estubo hace dos años, y llamó San Jacome con abundancia de agua, y Pasto, resolvi ir á el, para lo que envio á encaminar la Requa, y Caballada, que venia atras.

Enderezado á San Jacome, y en su solicitud, ya metido el sol nos afrontamos al cerrillo, que se hará inmediato, en cuio arribo, y aun habiendolo pasado no vimos un Rastro, vereda, ni otro indicio para persuadirnos habia cerca abitaciones de Gentes: accidente mui notable en toda especia de Indios por su genio ambulante, con cuia desconfianza, y venir ya algunos soldados á pie, por lo cansado de sus caballos tom? el partido de hacer alto, mientras se buscaba el paraje al rumbo donde le hacia el Padre Garces, quien con su compañero, y dos soldados fueron á esta diligencia, de la que se regresaron sin hallarlo, ya entrada la noche el Padre Garces se determinó á nueva solicitud, creiendo con ella lo hallarian, como que lo mas, que podria distar serán dos leguas, para lo que les di los sinco soldados que les podrán aguantar sus caballos.

Anduvo, dichas distancia, y mas, y despues de media noche volvió sin haber hallado tal San Jacome, cuio accidente no es de notar est? o no en las inmediaciones, que lo graduaba; pues en tierras poco andadas, y sin las mayores señas, como esta no es de maravillarse se yerre, quando acaese lo mismo en caminos mui trillados.

Hallando con incertidumbre de paraje util de agua, y pasto cercano, y qual necesito para poder reforzar Nuestras caballerias, y que las cargadas, y sueltas no parecieron en toda esta noche resolvi regresarme al mas inmediato como mas seguro; pues si en el siguiente dia no se hallaba otro como era dudoso, exponia á una general perdida á toda esta expedicion, como ha sucedido en iguales lances.

Wednesday, February 16, 1774 EN -- Dia 16 Miercoles. Luego, que se declaró comence a regresarme, y a poco que salio el sol encontr? con la Requa, Caballada, y Ganado, cuio Cabo Conductor me dio parte, que al principio de la noche antes, todos los expresados animales se habian cansado en el transito de los Medanos: que por este motivo dispuso parar a tales horas con el fin de darles algun descanso, y continuar la marcha de madrugada para el maior alivio de ellas, y que con todo no pudo mover de aquel citio, donde se hizo alto a seis caballerias, y tres Reses, rendidas enteramente: mandel? me siguiese, ? hiciese recojer todo lo cansado, mas que llegasen con ello de noche, como se verifican solo quatro, por haber muerto las restantes. A las dos de la tarde, a paso mui lento llegamos al pozo donde quedo la media carga, fatigados de hambre, sed, y con todas las Bestias rendidas, por cuia razón, y a otros travajos, que se pasaron, llamaron los soldados a este Pozo de las angustias; que á la verdad todos las tubieron, persuadiendose que con el atraso experimentado se frustase la expedición. Del embie nuestro ganado al que llamaron de enmedio por ser abundante de Agua, y haber, aunque poco algun carrizo, que coman.

Thursday, February 17, 1774 EN -- Dia 17 Jueves. Viendose el fatal, y general Estado, en que hallan todas nuestras caballerias, ? imposible, que hai para poder continuar con ellas la ruta determin? volberme á reforzarlas, algunos dias a la Laguna de Santa Olaya, como paraje mui inmediato, y á proposito, y con la mira de hacer venir á ella al Capitan de los Yumas Palma, y aventurar en su poder parte de la carga; como tambien las Bestias que me embarazan para pasar adelante, la que sobre lo flaco, que salieron, y malos ratos, que han tenido en la marcha, se han enfermado gravemente de comer una Yerba a falta de Zacate, que abunda por estas partes, haci?ndoles de babear mucho de color negro, y hediondo.

Puedese notar al atraso antecedente, y el haber emprendido la marcha por camino, y aguaje incierto á poca reflexion, llevando conmigo, como se dice al principio del Diario un Natural de la California, que salio de ella por los Rios Colorado, y Gila cuio camino, ó derecera deberiamos haber tomado; pero este intento que era justo seguir como mas seguro no ha podido tener efecto á causa de que el mencionado Natural salio perdido por inmensos Medanales á las Rancherias del Capitan Palma en las que padecio tal fatiga, y falta de agua, que pereció por uno, y otro su Muger, faltandole á el, y a un Hermano suio mui poco para que les acaeciera lo mismo: en cuia consideracion no se ha determinado á guiar hasta una, ó dos Jornadas adelante del Cerro para donde ibamos el dia quince proximo anterior, al que, aunque prescindiendo de las noticias, que nos dieron los ultimos Indios, que no nos quisieron acompañar: hasta el hablan precedido otros informes, que todos nos aseguraban llegar a dicho cerro sin la maior incomodidad, y no hai duda, que asi lo hubieramos conseguido, si nuestras caballerias estubieran mas utiles, y no se interpusiera el muro de Medanos, que asi nos parecia por el decadente estado de ellas.

Este dia despues del medio de el, y con media carga que de este modo solo se podrá conducir hasta la Laguna de Santa Olaya por nuestra propia huella, volvimos a los Pozos de enmedio para pasar en el la noche.

Hos se nos murieron de resulta de lo flaco, y enfermo cuatro caballerias, y otras tres ayer tarde, con celo motivo, el de la perdida de las anteriores, y haber hecho la jornada a pie á tierra los mas de los soldados les dije algunas expresiones á fin de animarlos con tales ocurrencias, quienes me respondieron, que como se lograse el intento de la expedición, no tendrian pesar, quando faltasen todos los caballos de verificarla del mismo modo, cuia voluntariedad se les aplaudio, ofreciendoles tenerlos presentes para recompensarles el afecto, que manifestaban al Real servicio, en quanto estubiese de mi parte.

Friday, February 18, 1774 EN -- Dia 18 Viernes. A las sieta de la mañana volbi las Mulas, que tal qual pueden cargar al Pozo de las Angustias donde quedó la media carga, para que las conduscan hasta este y de aqui en la misma conformidad á la Laguna de Santa Olaya, para cuio efecto, y cuidado dejo un Cabo con ocho soldados.

A las doce del mismo por el camino, y huella, que traje á estos Pozos, me regrese con la Caballada, Ganado, y algunas Mulas cargadas de los utiles mas precisos para la expresada Laguna, con el fin de que lo dicho llegue mas pronto al buen pasto, y agua, con lo qual hice alto al entrar la noche en paraje, que no tenia mas pasto, que las hojas de algunos arboles de Mesquite.

Saturday, February 19, 1774 EN -- Dia 19 Sabado. Al salir el sol nos pusimos en el camino, y Huella dicho, á las ocho, y media llegamos a la Laguna de Santa Olaya; poco despu?s lo hizo un Yuma, á quien habiendole gratificado, le encomend? pasarse de su casa para donde iba, recado a las Rancherias de adelante, a fin de que dijesen al Capitan Palma viniese á verme con su interprete Pima.

Sunday, February 20, 1774 EN -- Dia 20 Domingo. Concurrio mucha Gente a vernos, mostrando el maior contento: entre ella vino un Capitancillo de los Yumas, diciendome, que su compañero, y Amigo Palma no estaba en su casa pero que ya le habia eviado Propio para que viniese, que entre tanto el ocuparia su lugar, y que asi le mandase con satisfaccion.

Al fin de la tarde, me aviso un Indio, que cerca de donde acampabamos habia contado dos rastros de mulas nuestras; a cola busca se ofrecio, y fue inmediatamente el Capitancillo citado anterior.

A la once de la noche de hoy arribo la Requa con media carga, pero tan rendidas, que tuve por conveniente comiesen, y descansasen todo el dia siguiente.

Monday, February 21, 1774 EN -- Dia 21 Lunes. A las quatro de la tarde se regreso el Capitancillo Yuma con una Mula participandome, que la otra la habian muerto la Gente de la otra vanda del Rio, y Quiquima, que no pudiendola restaurar, ni castigar en el indio, que las tomo, y mató una, se lo habia satisfecho la Muger del padron, a quien el quitó la vida con una flecha, que me mostraba, y aun queria, que yo tomase en mis manos, cuio hecho me fue sensible, y desaprov?, como correspondia a su barbaridad; pero el dijo mui serenamente á mi vuelta de espalda, que poco importaba una vida y que en la que el quito solo sentia no se la aprovase yo. De este hecho se inferia la poca fuerza, ó escrupulo, que les hace a esto infelices matarse unos a otros, y asi se v?, que en poca ocupación de terreno, los mas son Enemigos, sin que medie para hacerlo interes, ni causa grave. Con el referido motivo exhorte á todos los presentes á la paz de unas Naciones con otras, y les dije con alguna severidad, que me enojaia con qualquiera, que hiciese Guerra, ó muerte, despues que en nombre de Dios, y el Rey, les habia mandado, que cesase toda especie de ellas, a lo que respondieron, no faltarán en lo sucesivo.

Tuesday, February 22, 1774 EN -- Dia 22 Martes. A las cinco de la tarde despache la Requa para que fuese á conducir la media carga, que faltaba.

Wednesday, February 23, 1774 EN -- Dia 23 Miercoles. A las diez de la noche arrivo la Requa con la media carga, que habia quedado atras.

Thursday, February 24, 1774 EN -- Dia 24 Juebes. Se dio descanso a todo, y al comenzar la tarde llegó el Capitan de los Yumas Palma, que mostro indecible recocijo al virme, significandome grande sentimiento por mis travajos, y el no saber los caminos para donde yo queria pasar, a fin de poderme dar noticias de ellos; pero en lo que mas esforzó su sentimiento fue en las muertes de las caballerias, creyendo, que en ellas perdiamos los maiores bienes, ó tesoros.

La misma tarde resolvio voluntariamente el Padre Garces yr á visitar las Rancherias inmediatas que hai de aqui para avajo, en las que dice estuvo hace dos años con esperanzas de adquirir en ellas noticias favorables á nuestra ruta, cuio regreso le encargue executase dentro de. quatro, ó cinco dias, que es lo más, que tardariamos á ponernos en marcha.

Entrada la Noche comenz? á pulsar al Capitan de los Yumas á ver si indicaba algun motivo para no hacer de el la confianza, que me dictaba, y no hallando en el causa para recelarme, le comunique la intencion, que me asistia de dejarle parte de la carga, y de mi mente en su poder, por no poderla pasar, a causa de los motivos ya referidos, y en que en su casa me esperasen, mientras yo iba á volver un poco mas de un mes, a cuia noticia le añadi que volverla acompañado de maior numero de soldados, que si venian otros de las partes por donde yo baje a su casa, como podia suceder, viendo mi tardanza, en la mia les diese noticia de mi, y le dijese me esperasen en la suia, a lo que me respondió, quedaba entendido de que de todo me ofrecia dar buena cuenta, como lo hizo del Padre Garces, quando vino solo, y del Natural de California, que salio a su Rancheria el año pasado, á quien personalmente condujo al Presidio de Altar. que para que las Mulas pudiesen llegar a su casa conduceria la carga ahombros de los suios á cuia omision al trabajo no me costó poco persuadirle; como tambien los motivos, que me daba para, que sin ningun cuidado me fiase enteramente de su buen corazon, y proceder.

Para lograr mas el acierto comuniqu? lo expresado á todos los Individuos de la expedicion, que se hallaban presentes: a una voz me dijeron lo abrazaban como mio unico arbitrio para poder hacer las diligencias necesarias á concluir la solicitada expedición, cuio asunto por lo que se interesaba el servicio de Dios, y del Rey, como el honor de los concurrentes á ella debia prevalecer a qualquiera otro, aunque fuese patente el riesgo, y perdida de lo que se determinaba dejar; pero que esta no se debia suponer á la prevencion de un Indio, que tan manifestadamente nos respetaba y amaba, de lo que sobraban pruebas, como lo que habia atendido a nuestros Dependientes ya repetidos, y en la comunicacion, y comercio que tenia ha muchos años en nuestros Pueblos, lo de los Papagos, y Pimas que nos están subiugados, y que viviendo estos, y viviendo a los Yumas con frecuencia no era facil á los ultimos intentar alguna perversidad pues quando no la contubiesen los Pimas, no se las podian ocultar para dar aviso a nuestras Gentes, que tanto temen los Gentiles: que por ultimo no habia otro recurso. En cuia virtud volbian á repetir se abrasase para que llegase á tener efecto la expedición, y quando no los maiores esfuerzos que á ella condujesen para lo que se ofreciera en el caso de perderse ó rendirse todas las caballerias á emprender la marcha pie a tierra hasta donde alcanzasen sus alientos; que dicha perdida, ó rendicion no se verificaria con lo que se reforzarian, y el alivio en no arrear ni cuidar Ganado; y que en las pocas Mulas, que hai razonables se pueden llevar en cargas livianas vivieres para un mes, que era lo mas, que nos podiamos tardar en salir a algunos de los nuevos Establecimientos de la California Setentrional, cuio general dictamen ofreci tomar, con lo que quedamos todos complacentes.

Friday, February 25, 1774 EN -- Dia 25 a 28 Viernes a Lunes. Se dieron al descanso, sin ocurrir novedad particular ni indicio de haberla en los muchos centenares, que tanto de Yumas, Cojas, y Quiquimas concurrian a vernos. Con tal satisfaccion, que mui señalado era el que trata algun arco, ó flecha para cazar Animales mui debiles, Vivian en dicho numero dia, y noche entre nosotros, sin solicitar otra cosa, que el que se les tocara un violin, que los soldados conducian para su diversion á que se aficionaron tan extremadamente, que dejaron las propias suias, y en su lugar aprendieron las que usan nuestra Gente, particularmente las Mugeres, que incesantemente querian.estar bailando las seguidillas, que les enseñaron los soldados, de cuios pasajes quedarón bien impuestas, como de saludarnos todos sexos cada vez que nos veian, con decir: Ave Marta, Viva Dios, y el Rey, cuias alabanzas no costó mucho para que las aprendieran por la facilidad, que tienen, como ya se ha dicho en pronunciar la lengua castellana, y por mui poco Abalorio, ó tabaco.